2.2 – Hidrogeología

El Distrito Federal está ubicado en la Provincia Hidrogeológica del Escudo Central, donde se distinguen dos grandes grupos de acuíferos: el Dominio del Acuífero Poroso y el Dominio del Acuífero Fracturado.

Dominio Poroso: el agua ocupa los poros entre los minerales que componen el cuerpo rocoso. Este dominio está representado por suelos y rocas en proceso de alteración. Debido a su espesor y conductividad hidráulica, estos acuíferos pueden clasificarse como P1, P2, P3 y P4. Los sistemas P1, P2 y P3 se caracterizan por sus grandes espesores (>5 m) y conductividad hidráulica respectivamente alta, media y baja. El sistema P4 se caracteriza por sus pequeños espesores (<1m, que pueden alcanzar los 2,5m) y baja conductividad hidráulica.

Dominio Fracturado: el agua se acumula en fracturas, grietas o fallas. Estos acuíferos constituyen el sistema de aguas subterráneas profundas, con una profundidad máxima de poco más de 250 metros. Su conductividad hidráulica está relacionada con el número de fracturas, sus aperturas e intercomunicación. Se clasifican en cuatro conjuntos de sistemas acuíferos: Paranoá, Canastra, Araxá y Bambuí. El sistema Paranoá se divide en los siguientes subsistemas: S/A, A, R3/Q3, R4 y PPC, mientras que el sistema Canastra se divide en los subsistemas: F y Q/F/M. La utilización de estos acuíferos se realiza mediante pozos tubulares profundos, con caudales que varían de cero a valores superiores a 100.000 l/h, teniendo la gran mayoría de los pozos caudales entre 5.000 y 12.000 l/h.